La prensa vecinal forma parte del patrimonio institucional varelense, y como tal, debe ser resguardada por las autoridades impidiendo el proteccionismo a medios foráneos o de «desconocida» procedencia, o en el peor de los casos subensionar encubiertas publicaciones, así como todos nosotros debemos proteger el patrimonio artístico, cultural, histórico, arquitectónico y principalmente el patrimonio viviente de nuestros barrios como son los vecinos, anónimos o proceres, pobres o ricos, viejos o jovenes; cualquiera fuera el antagonismo pero que siempre estan codo a codo con nosotros.
Nuestras autoridades comunales deberían tener una primera obligación y una sola preocupación mediática primaria, y es la de proveer de material, sostener, cuidar y preservar los Medios Vecinales, esos medios periodísticos de primer grado que acompañan, que difunden y permiten crecer desde el mostrador de los comercios del barrio, desde el boca a boca de los lectores y desde la pasión insobornable de los comunicadores vocacionales del vecinalismo, esos mismos que no piden nada a cambio, que en muchas oportunidades debemos echar mano a nuestros bolsillos para salvar los gastos.
No nos cabe ninguna duda, nuestro lugar es al lado y del lado de los vecinos, porque estamos convencidos de la necesaria contribución transformadora de la prensa vecinal, acompañándolos en sus reclamos, sus proyectos, sus preocupaciones cotidianas: siendo voceros de las instituciones barriales que no tienen llegada a los grandes medios de comunicación, somos la posibilidad alternativa de hacerse oir.
Las campañas de difusión institucional serían mucho más positivas si los funcionarios de turno optasen por difundir sus ideas, logros y proyectos en auténticos Medios de Comunicación Vecinales, pero existe una limitación, no nos pueden contener, controlar, manipular, somos peligrosos por que «hacemos pensar a la gente» y activistas por que «somos la voz del pueblo», no nos pueden comprar, somos insobornables; entonces es más fácil disfrazar a un alto costo económico que pagamos todos, a una publicación oficial como si fuera un Medio Vecinal y darle a los lectores un consabido mensaje de «pan y circo».
domingo, 3 de mayo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario