viernes, 7 de agosto de 2009

EL INDICE DE LA POBREZA

El investigador Ernesto Kritz, fundador y director de SEL Consultores, especialista en empleo y salarios, dijo que en el Gran Buenos Aires, la pobreza ya tiene picos de 49%. Nos preguntamos ¿Cuál es el «éxito» del crecimiento prometido por el «duo» Kirchner? En Varela crecen los cartoneros y carros, sinónimos de altas Necesidades Básicas Insatisfechas. La desaceleración en la creación de empleo –seguida de la destrucción de puestos laborales– y la presión inflacionaria han vuelto a sumergir en la miseria a millones de argentinos, y según el economista Ernesto Kritz, el nivel de pobreza ha retornado a los índices de 2001.- Estas afirmaciones son casi coincidentes con las del flamante ministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires, Baldomero Álvarez de Olivera, que reconoció de acuerdo a estudios privados la pobreza en el territorio bonaerense alcanza a casi el 30% del total de la población. Por supuesto que ninguno de estos índices son corroborados por el INDEK, que extrañamente, o … no, mes a mes manifiesta un descenso ?? de los niveles de la pobreza.- En Varela esta aceleración se la puede medir a simple vista: el avance de los carros en la zona del centro y en los barrios, el crecimiento de las ferias informales donde la gente vende de todo y lo poco que tiene marca a las claras las necesidades de miles de vecinos de ganarse la diaria, con todo tipo de emprendimientos. En un reportaje que el semanario local La Colmena le hiciera recientemente al padre Miguel Hrymacz, titular desde hace 30 años de la parroquia Medalla Milagrosa, manifestó que la pobreza crece con toda crudeza a nivel local, ampliando: «La realidad que nos marcan los distintos sacerdotes de la Diócesis indica que es más del 40%. En las reuniones que mantenemos todos coinciden en que cada vez hay más gente que viene a pedir ayuda, especialmente alimentos y dice que no hay trabajo. Por ejemplo, hay gente que hace un año tenía trabajo y ahora no. Realmente no entiendo la política que en ese sentido lleva adelante el gobierno nacional».
«En el tema de alimentos aquí en nuestra parroquia con los comedores, los hogares, jardines maternales y de infantes, la ayuda oficial ha bajado un 60%. La última vez que firme un convenio con el área respectiva de Desarrollo Social de la Nación, nos dieron solo el 40% de lo que recibíamos antes en el rubro alimentario. O sea, el 60% menos. Eso significa que una gran cantidad de gente se queda sin comer». Desde el HCD, varias veces, les envían gente para que les den colchones, frazadas, camas, ropas. Les dicen vayan a la Medalla Milagrosa que les van a dar. Y los mandan algunos concejales. «Es una vergüenza», dice el padre Miguel , «Aquí no se cobran ni los sacramentos, ni las misas ni los casamientos. La entrada de dinero que tenemos aquí es ínfima. Nos mandan a la gente para que nosotros cubramos lo que el Estado debería darles».

No hay comentarios: