domingo, 6 de septiembre de 2009

PALOS POR QUE BOGAS, PALOS POR QUE NO BOGAS

Así dice el conocido refrán que podríamos aplicarlo con toda justeza a las actitudes de personas que continuamente están reclamando obras y mejoras en el barrio, y cuando las mismas llegan le buscan «el pelo al huevo» y salen a despotricar por algunos inconvenientes que provoca el avance de los trabajos de infraestructura.-
Parecería que viven agazapados y proclives a denunciar cualquier inconveniente transitorio que se puede incurrir cuando «se hace algo».-
Estas reflexiones, no son productos de ningún «apriete» o cambio en mi manera de pensar; son el resultado a más de cuarenta años de vivir en el barrio y de estar esperando obras de cloacas, pavimentos, agua corriente, luces en las calles, etc. etc.; son cuarenta años de estar viviendo con bombas de agua, pozos ciegos, en calles de tierra y sin luces;……entonces ahora, que de a poco se ven mejoras, que vamos progresando, muy lentamente, pero avanzando, debemos tener un poco de paciencia.-
Todo progreso, toda obra produce inconvenientes momentáneos; pavimentar una calle provoca que la misma esté por un tiempo inhabilitada, el tendido de cloacas genera que se rompan veredas y calles, que los rellenos sean superficiales (por un tiempo, para no perjudicar los niveles de los caños); pero bienvenidas sean todas estas molestias si es que voy a tener cloacas, agua corriente, pavimentos, etc. etc.-
En estos menesteres se parece mucho a lo que nos pasa con el fútbol, todos somos «directores técnicos», queremos que nuestro equipo forme y juegue como nos parece a nosotros y descartamos la capacidad de los que están preparados para de ello.-
No todo lo que nos pasa alrededor o nos quieren vender es rosa, entonces disfrutemos lo poco o mucho que podemos conseguir, seguramente el día de mañana al mirar para atrás y al ver los logros algunos sentirán «vergüencita» por haberse quejado por una vereda rota, una calle cortada o un charco de agua.-
Seamos pacientes, todo llega, lo digo yo que llevo más de cuarenta años en el barrio, que llegué a Villa Angélica cuando había una casa cada dos cuadras, cuando no había luz, ni agua, ni cloacas, ni calles (de tierra) abiertas; entonces los pocos vecinos que eramos en el barrio, no nos dedicamos a protestar, cada uno entendió que debía hacer algo y así lo hicimos, con veredas, empedrados de calles, tendidos de cables y lamparitas en los postes y saben que...... era todo mucho mas lindo por que día a día disfrutábamos orgullosos el pequeño avance del barrio.-

No hay comentarios: